Cada vez que llegamos a clase, no sabemos en que aventura nos vamos a meter. La morivación, el interés, es imprescindible para captar su atención. Y en el día de hoy, tras acabar la asamblea, hemos estado escuchando unos ruidos raros por la clase. Así que nos hemos separado para ver que estaba pasando. Y ha sido rápido ya que debajo de nuestra biblioteca, en un cesto, había una criatura atrapada porque se había salido de su cuento y no podía volver.
Chloe no ha tardado nada en encontrarlo y hacerse rápidamente su amigo. Ñac Ñac se presenta a sus compis y nos ha contado que le gustaría probar cosas nuevas que no fueran cuentos, qué probó una vez una cosa muy rica pero no fue capaz de saber que era y por eso nos lo trajo.
Dos misterios resueltos. Ñac Ñac era quien lo había estado líando en la clase y el que nos tenía locos con sus ruidos. Ahora nos pide ayuda para saber más de ese producto. ¿Creeís que nuestros pequeños locos bajitos habrán decidido ayudarle?
Cuántas emociones.
Efectivamente, con una lluvia de ideas, pusimos en común todo lo que sabíamos del chocolate, así como decidimos en una primera vuelta que cosas debería saber Ñac Ñac y nosotros sobre el chocolate.
El resto del día fue mucho más tranquilo, hay que decir.
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