Si, este decilioso batido de fresa que hemos tomado ha sido todo un descubrimiento para muchos de nosotros. ¿Pero cómo hemos llegado a esto?
Tenemos leche fresquita.
Una batidora que sigue haciendo kilómetros de cole a cole.
Y un hermoso huerto cuyas matas de fresas nos han regalado un mogollón de fresas que hemos recogido con anhelo y entusiamo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario