¡Sorpresa, sorpresa! Llegar al cole sin saber que puede depararte el día es sencillamente maravillo.
Nuestra exploradora Leonor viene al cole con un girasol sembrado y en plena forma, y una flor cortada de esta maravillosa flor.
Al tiempo, otra compañera nos trae pipas, semillas de girasol, para hacer una degustación.
Y el maestro nos ha presentado a un pintor sin oreja llamado Van Gogh que pintó hace mucho tiempo un jarrón lleno de flores de girasoles que hemos intentado reproducir. Bueno, reproducir no, reinterpretar. Con técnicas de pinturas diferentes nos acercamos a esta obra artística de fama mundial.
Y como colofón, a comer pipas.
De lo que me gusta mucho, como mucho. Y de lo que me gusta poco, como poco.
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