Justo cuando volvemos de entregar las cartas a los Reyes, notamos que en la clase no está nuestra Hada Eustolia. No podemos empezar el cotillón sin ella porque debe conocer las diferentes tradiciones y momentos de estas fiestas, así que todos nos ponemos por clase, por el patio, por el baño, por el pasillo a buscar al Hada porque de lo contrario no podemos empezar la fiesta.
¡Por fin! Eustolia y su amiga están el árbol de Navidad....
¡SE HAN CONVERTIDO EN HADAS DE NAVIDAD Y LUCEN COMO NUNCA EN EL GRAN ABETO DE NAVIDAD!
Juntos volvemos a clase para dar comienzo al cotillón todos juntos.
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